1 -Texto
del catálogo Alice-Ville por Belén Gache
2 -Entrevista suplemento
plástica Diario Rosario 12: "Complejidad inventiva en la
obra de Alicia Herrero", por Claudia Laudanno (23-08-05)
3 -Texto para Rosariarte: "Alice Ville:
una forma de vivir el arte", por Marcela Römer
4 -Artículo del diario La Capital:
"Alicia Herrero y una obra donde el público puede aportar
lo suyo", por E.L. (14-08-05)
5 -Descripción por Alicia Herrero
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1
ALICE-VILLE
Por Belén Gache
ALICIA:
LA CIUDAD, EL MUNDO, EL LIBRO
Alice-Ville. Ciudad Alicia. Una ciudad que funciona tanto como museo
como del mundo. El mundo propio de Alicia, cita intertextual obligada
de Alicia en el país de las Maravillas. Así como en el
caso de Lewis Carroll, el texto nos envuelve en un laberinto de juegos
del lenguaje y paradojas lingüísticas, asistimos aquí
también a un trastrocamiento de las leyes perceptuales sin que
sea posible designar un punto de vista privilegiado sobre los otros.
Pero en Alice-Ville también hay otra dimensión catacrética
de la ciudad como museo: la ciudad como libro. Si la ciudad Alicia es
el museo donde despliega sus juegos visuales y anamórficos, el
museo es a la vez un libro que se espacializa. Así como el país
de las Maravillas es un país de texto donde el espacio de la
lectura se asimila a la lectura del espacio (para utilizar un juego
de palabras carrolliano), Alice-Ville se asemeja a uno de esos libros
troquelados, que se despliegan, se metamorfosean y están llenos
de sorpresas. Cada una de sus obras será una página, un
capítulo y también, un acontecimiento.
LA PALABRA Y EL EFECTO DE SENTIDO
-¿En qué sentido, en qué sentido? - se pregunta
Alicia, en el país de las Maravillas.
En los dos sentidos a la vez, dirá Giles Deleuze en su Lógica
del sentido. Deleuze, quien analiza allí aspectos filosóficos
de la obra carrolliana, plantea una lógica basada en la ausencia
de sentido en el discurso, en el lenguaje y, en general, en todo signo.
El sentido es incorpóreo e inmaterial. El sentido es solamente
un efecto de superficie como un efecto óptico o un efecto de
espejo (effet de miroir). Y aquí la cita intertextual estará
dada por Alicia a través del espejo.
La primera obra de Alice-Ville es un poema de dos palabras presentadas
la una junto a la otra: FUGAZ - INSCRIPCIÓN. La palabra “fugaz”
es una sombra que se proyecta sobre la pared. La palabra “inscripción”
está grabada en el cemento.
Roland Barthes hablaba de dos tipos de escrituras: la de la inscripción,
la hendidura, la marca, aquella que corresponde a la letra irreversible
(letra cuneiforme, jeroglífico; aquella de la Ley, la Historia,
el Monumento); y la de la caricia de la superficie (ideogramas trazados
con pincel o con fieltro). Así como en Alicia en el país
de las maravillas las series se despliegan en los dos sentidos a la
vez: comer-hablar, cuerpos-lenguaje, corpóreo-incorpóreo,
en Alicia Herrero, el sentido se despliega hacia ambos pares de oposición:
inscripción (la palabra-sustancia, cosa o re-presentación
de la cosa) y fugaz (la palabra incorpórea, mero efecto de sentido).
EL CASTILLO Y EL BOSQUE. LAS SOMBRAS
Los cuentos de hadas, lejos de presentarnos un universo ingenuo, nos
presentan profundos conflictos existenciales y se asocian a los miedos,
los sueños y, sobre todo, las pesadillas. Los cuentos de hadas
están poblados de castillos y de bosques. El castillo y el bosque
también se presentan como otro par de oposición: el castillo
es el centro; el bosque, su periferia. El castillo representa lo interior,
el refugio pero también el encierro con sus torres y murallas.
El bosque, lo externo, los peligros y la inhospitalidad de la intemperie.
En los cuentos de hadas, sin embargo, tanto el castillo como el bosque
aparecen encantados y nos presentan sus trampas. En Alice-Ville, nos
enfrentaremos también con una serie de trampas e ilusiones ópticas.
Se nos indica, por ejemplo, que el castillo debe ser mirado de determinada
manera; un cono de visión determinará su perspectiva.
El bosque calado de Alice-Ville, por su parte, proyecta su sombra y
se convierte en un espacio mítico, tenebroso y oculto. Como en
los cuentos de hadas, las sombras cambiantes nos hacen sospechar de
espacios habitados, misteriosos y plenos de amenazas.
En 2002, Alica Herrero realizó la obra Bosque. La misma consistía
en un cuaderno de hojas en blanco. A partir de la acción de dibujar
y re-dibujar una misma viñeta de un bosque con movimientos continuos
y progresivos que añaden, repiten y difieren trazos, Herrero
convierte sus páginas en espacios de infinitos recorridos en
los que confundirse y perderse. El libro-bosque. Quizás todo
libro no sea en el fondo más que un bosque de palabras.
Las sombras:
En Turquía, existe el Karagoz. En Java, el wayang purwa. El teatro
de sombras se ha desarrollado en muchos países, incluidas India,
China, Indochina, Persia y el Asia Menor. Frecuentemente su práctica
ha sido asociada al culto de los muertos.
En Film, una obra de 1999, Herrero presentó cinco viñetas
de escenas de cuentos de hadas caladas en láminas de aluminio.
La luz sobre las láminas proyectaba las sombras distorsionadas
sobre la pared. Las sombras, fantasmas incorpóreos, invitan a
la imaginación y a la narración onírica.
JUEGOS DE PALABRAS Y JUEGOS DE PLATOS
En Alice-Ville hay juegos de sentido, juegos de luces y también
juegos de platos. Nuevamente el par material-inmaterial y nuevamente
el par deleuziano comer-hablar, cuerpo-lenguaje.
Las obras de Lewis Carroll remiten al contexto de una sociedad victoriana
que gustaba de inventar tanto juegos de salón como diferentes
deportes - cricket, rugby, tenis, futbol, croquet. Alicia en el País
de las Maravillas es un texto plagado de juegos: juegos de barajas,
ajedreces, juegos de croquet, carreras, pero por sobre todo, juegos
lingüísticos y también el juego de té del
famoso episodio de la merienda de Alicia.
El té de la tarde, en la Inglaterra victoriana y eduardiana era
una ceremonia formal, un encuentro ritualizado que motivaba el uso de
mejor vajilla de porcelana de la casa y la facción de diferentes
tortas, dulces y galletas. También, la presencia de visitas e
invitados. En el capítulo Un té de locos, existen una
serie de peculiaridades. Dado que siempre son las seis de la tarde,
la mesa de té está continuamente servida. Los invitados,
por su parte, distan de ser personas razonables: un sombrerero (era
común en la época asociar sombrereros y locura, dado que
usaban mercurio para tratar el fieltro y este elemento tenía
nocivos efectos en su comportamiento, implicando incluso locura si la
exposición al mismo era prolongada) , una liebre de marzo (existía
entonces el dicho “mad as a march hare” debido a que las
liebres empezaban entonces su temporada de celo) y un lirón,
personaje que hablaba prácticamente en sueños.
En un trabajo realizado para el Museo Boijmans van Beauningen (Rótterdam,
2000-2002), Alicia Herrero presenta una serie de diálogos que
tienen lugar entre tazas y platos gigantes, en una dimensión
similar a la del cuerpo humano. ¿Son los utencillos los que crecen
o son los humanos los que han encogido su tamaño? En Alicia en
el País de las maravillas, Alicia come un pedazo de hongo mágico
y, mientras espera el efecto que tendrá la ingesta sobre su organismo,
se pregunta: ¿en qué sentido, en qué sentido? El
cuerpo empequeñecerá o se agigantará pero, en permanente
metamorfosis, nunca permanecerá siendo el mismo.
Un juego de té implica, además, una colección finita
de elementos emparentados entre sí, una estructura de objetos
afines. Herrero lo contrapondrá a su Conversaciones, obra realizada
a partir de elementos de vajilla que el público irá aportando
a la obra y en la que registraremos un acumulamiento progresivo, desmedido
y potencialmente infinito de piezas diferentes. Contrariamente a un
tradicional juego de té, se trata aquí de piezas heterogéneas,
sin pedigree, ilegítimas, “multirraciales” y “multigenéricos”,
cuestionando tanto lo que es lo mismo y lo que difiere como lo que es
sucesivo y simultáneo. Conversaciones no es sino un bosque de
tazas.
UN IMPERIO EVANESCENTE
En el capítulo V de Alicia a través del espejo, Alicia
se encuentra de pronto en un comercio. La Reina se ha convertido sin
más en una oveja que atiende el lugar mientras teje un abrigo
de lana con catorce agujas de tejer a la vez.
-¿Qué deseas comprar? - le pregunta la oveja a Alicia.
Alicia observa las estanterías repletas de toda clase de cosas
curiosas, pero lo más extraño es que cada vez que trata
de fijar la vista en algún estante, ese estante en particular
parece vacío. En vano, intenta descifrar qué es ese objeto
brillante que se encuentra en el estante inmediatamente superior al
que ella está mirando y que a veces parece ser una muñeca
y otras veces, una caja de herramientas.
En el video Imperio, una imagen fija parece construirse y deconstruirse
delante de nuestros ojos, siempre difusa e indistinta. Como en un test
de Rorschach nos esmeramos intentando reponer sus contornos e imaginando
sus formas. Con un poco de suerte, nos daremos cuenta de que se trata
de una fotografía un juego de porcelana Imperio tomado de un
catálogo de Christie´s.
EL AGUJERO DE LA CERRADURA Y EL ESPEJO
Como señala Martin Gardner en su famoso texto Annotated Alice,
minucioso estudio de la obra de Lewis Carroll, las habitaciones y puertas
secretas eran un motivo común en la época victoriana.
Las casas eran construidas con pasadizos y espacios ocultos y era corriente
la fantasía de mirar a través de los huecos de la cerradura
de la cual dejan testimonio las novelas rosas de la época. La
sala donde se proyecta el video Imperio nos depara una sorpresa: descubriremos
allí junto una habitación secreta donde se ha montado
un taller de cerámica.
La acción de espiar por el hueco en la pared guarda fuertes similitudes
con mirar un espejo: en ambos casos se abre frente a nosotros un espacio.
En ambos casos nos enfrentamos con la fantasía de pasar del otro
lado. La pared y el espejo no se constituyen como límites sino
como pasajes entre un aquí y un allá, entre una lógica
y otra.
Lo inmaterial de la imagen del video se contrapone con la materialidad
del cuerpo real del ceramista. La porcelana Imperio, fetichizada como
objeto suntuario en la casa de remates se convierte aquí en la
evidencia de las condiciones de producción, en factura manual,
en trabajo.
SEMBRANDO SEMILLAS DE TIEMPO
El espacio de la Administración del Museo es intervenido con
una serie de cajones con almácigos, una suerte de micro-huerta
que se instalará el día de la inauguración de Alice-Ville
y que permanecerá allí hasta su fin, monitoreada y regada
con asistencia técnica.
Continuando con la literatura feérica, nuevamente es frecuente
allí el motivo del castillo que desaparece, engullido por la
vegetación del bosque que crece a su alrededor en forma desmedida.
Aquí también será la lógica del proceso,
del crecimiento, del movimiento la que prime, pero en este caso, el
museo castillo ciudad será invadido desde adentro, en el corazón
mismo de su administración. Proceso, crecimiento, movimiento
implican al devenir, al tiempo. Es el tiempo el que irá ocupando,
carcomiendo, asfixiando la voluntad de eternidad del castillo museo.
Cronos y Aión: el tiempo cotidiano (el tiempo del cuerpo) y el
tiempo incorpóreo de la Eternidad entrarán aquí
en lucha.
¿EN QUÉ SENTIDO?
En Alice-Ville, el espacio real y el tiempo real son ficcionalizados.
El tiempo real, el de la acumulación de utencillos, el del trabajo,
el del crecimiento orgánico de las plantas, el del cuerpo, se
convierten en materia y motivo de las obras. Por otra parte, como sucede
con el reloj del conejo blanco, en el país de las Maravillas,
la lógica misma del tiempo se subvierte: la obra Conversaciones,
al ser concebida como proceso, quedará concluida el último
día de la muestra y no el día de la inauguración,
como tradicionalmente sucede. La exposición, además, involucra
una serie de cambios en la rutina cíclica de la Institución,
entre ellos, el cambio en los horarios de apertura al público.
En cuanto al espacio real, así como en otras ocasiones Alicia
Herrero trabajó con museos de papel (construidos con imágenes
de obras tomadas de catálogos y libros de arte), aquí
el espacio se vuelve un libro espacializado, al igual que el proyecto
Magazine in situ (2004-2005) se convierte también en una revista
espacializada, en tiempo y espacio real.
El cuestionamiento acerca de los límites entre realidad y ficción
nos lleva a cuestionar la efectuación espacio-temporal del acontecimiento.
Siguiendo la lógica deleuziana, no es la ocurrencia espacio-temporal
del mismo la que lo constituye como tal sino el plus de significación
que aporta el observador. El acontecimiento se construye como un ensamble
de puntos singulares, sensibles y críticos.
Incorpóreo e inmaterial, el sentido es solo efecto de sentido.
¿Cómo se debe mirar el castillo para ver realmente al
castillo? ¿Cómo mirar el bosque de sombras? ¿En
qué sentido, en qué sentido?, pregunta Alicia y vuelve
a preguntar la otra Alicia.
BELEN
GACHE.
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2
COMPLEJIDAD
INVENTIVA EN LA OBRA DE ALICIA HERRERO
Entrevista: Diario Rosario 12, Suplemento Plástica
por
Claudia Laudanno (23-08-05)
http://www.rosario-12.com.ar/
La
artista realizó una intervención en el Museo de Arte Contemporáneo
de Rosario. Un "banquete desordenado" de géneros: ensayo,
performance, intervenciones, proyecciones, juegos ópticos.
La artista porteña Alicia Herrero acaba de realizar un intervención
espacial en el Museo de Arte Contemporáneo de Rosario (MACRO),
denominada Alice Ville. En diálogo con Rosario/12, Herrero describe
y subraya los aspectos más importantes de este ambicioso proyecto
topológico.
¿Qué características particulares reviste Alice
Ville?
El proyecto Alice Ville bien podría ser un libro espacializado
o una película en otro formato. Aborda la noción de topos
en una dimensión que incluye sistemas de relación específicos:
la arquitectura del museo, los distintos departamentos o áreas,
su llegada a la comunidad; problematiza el punto de vista único
sobre las cosas y propone otras visiones sobre lo mismo de siempre experimentando
in situ procesos de cambio. Deviene trabajo en colaboración con
las distintas áreas del museo: producción, comunicación,
conservación, diseño, montaje, administración y
tienda. Esto hecho en colaboración, también, con miembros
de la comunidad de Rosario como la ceramista Graciela Pichard y un número,
por el momento indefinido, de colaboradores que prestan sus objetos
personales al museo para ser expuestos durante un mes en el mismo. El
proyecto Alice Ville, es un lugar donde conviven por lo menos tres problemas:
el museo (la colección, la noción de arte, su status,
las categorías), la noción de ciudad (vida cotidiana)
y la noción de sujeto. Recurre a una herencia artística
que incluye la experimentación y el juego como claros manifiestos
críticos.
¿Cuáles serían las áreas que constituyen
esta intervencion temporal del MACRO?
Podría decirse que Alice Ville está conformada por siete
zonas: la entrada, el pasillo, los distintos pisos (primero, segundo
y quinto completos), la tienda (en el séptimo piso) y la oficina
de administración (en el piso ocho). Complejizan el espacio en
su dimensión físico-simbólica y poético-política.
Uno de los problemas que aborda es el de la apropiación de la
propia presentación artística llamada exposición,
intervención, que dura aproximadamente un mes. La misma está
tratada como espacio de producción permanente, está reformulado
su sentido, hay piezas procesándose in situ: "Conversaciones"
(primer piso), "Las cosas" (segundo piso), "Estoy acá"
(en la tienda), "Microhuerta" (en la oficina de administración).
Esta ciudad o villa es un lugar interesado en el acontecimiento de la
experiencia estética como práctica y cotidianidad. Aún
el quinto, que presenta estados estables de la materia, son juegos ópticos
donde por lo menos dos puntos de vista son involucrados para mirar "El
bosque de sombras" y "El castillo". "El bosque..."
es también una versión de dibujo en 20 páginas
armado como libro. "Imperio" es un video donde la imagen se
arma y se disuelve regularmente. Alice Ville es movimiento puro; nada
estará quieto durante el mes y el final nos encontrará
con piezas que ha mutado su naturaleza.
Cómo
artista contemporánea, ¿cuáles serían, las
diferencias que percibe entre el concepto de "intervención"
y el de "interferencia"?
Para una
producción que despliega un alfabeto que involucra documentos
de la vida cotidiana puestos a conversar con documentos del sistema
del arte, situaciones reales con fantasmagóricas o ficcionales,
la noción de intervención o interferencia aparecen en
mi universo como limitadas, como demasiado connotadas, en realidad hace
tiempo que cuesta circunscribir mis practicas a una sola nominación
clasificatoria, pueden ser representantes de mas de una de ellas: los
calados de aluminio son objetos y son también grabados, el proyecto
"Chat" es tanto un proyecto que creó situaciones interactivas
como una instalación, el "Guided Tour de Trinidad"
es una intervención urbana, al mismo tiempo que un proyecto situacional,
preferí enunciarlo como guided tour; "Elipse" es una
video instalación pero mas un proyecto interactivo y una intervención,
"Alice Ville", considerando el cruce de preguntas que plantea
se presenta como un banquete desordenado de géneros: ensayo,
documental, performance, intervenciones, proyecciones, juegos ópticos,
bioadministración.
¿De
qué forma proyectó esta particular obra site-specific?
Alice
Ville es un lugar donde mis propias producciones debaten entre sí,
son referentes el proyecto "Chat" en Museo Boijmanns 2000-01
y el proyecto "Alicia y su fábrica de desarmar imágenes",
pensado para el MAMBA en 2002. Ambos proyectos indagan sobre un concepto
de des-verticalización del discurso, alterando las convenciones
y llegando a percibir todo paisaje como un "escenario construido".
Relecturas de la condición museística. En este sentido,
la arquitectura del MACRO es forzada. Las paredes, las aberturas del
museo son materia de trabajo y de conversación. La inclusión
de formas horizontales como la proliferación de "Conversaciones"
en el primer piso, que se irá extendiendo a medida que lleguen
los objetos, la "Microhuerta" o el trabajo de la ceramista,
que van creciendo y ocupando mayor territorio, se presentan como un
cruce sobre la coordenada vertical. El recorrido podría abreviarse
y sintetizarse en algunas de estas zonas: la puerta de entrada con el
nombre del museo es intervenida con un gran cartel que indica "Alice
Ville", en color verde. El pasillo de entrada se recorrió
con la sombra proyectada en la pared de la palabra "fugaz",
cruzada por la palabra "inscripción" taladrada en la
pared, teniendo como intervalo entre ambas el propio pasillo donde circulan
las personas. En el primer piso nos encontramos con "Conversaciones",
una propuesta que deriva del proyecto "Chat". Aquí
el museo es puesto a conversar con objetos que miembros de la comunidad
de Rosario están acercando al museo, al mismo tiempo que los
medios de comunicación son atraídos hacia el museo pero,
en este caso, no sólo para difundir e informar sobre exposiciones,
sino como parte de la propuesta.
¿Por
qué cree que los artistas argentinos contemporáneos recurren
cada vez más al uso del espacio en todas sus formas?
La noción
de autor, de comunidad y de museo se presentan en crisis. La visión
de espacio es una sinestesia cultural donde ocurren las producciones
artísticas pero también sucede la "vida real".
El arte desea salir fuera de si, convivir en nuevos contextos, producir
alteraciones, sentir los latidos de su corazón, en esta dirección
está orientada Alice Ville.
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3
ALICE VILLE, UNA FORMA DE VIVIR EL ARTE
Marcela Römer
www.rosariarte.com.ar
Alicia
Herrero es una artista situada en el pensamiento conceptual contemporáneo,
su accionar frente a las perspectivas del arte se asemeja a las ramificaciones
del árbol de la vida, que aunque fetiche, muchas veces ejemplifica
claramente qué se siente frente al arte, o, mejor dicho, cómo
se puede pensar el arte.
Alice Ville, instalación artística que convive en la superestructura
del Macro (Museo de Arte Contemporáneo de Rosario) hasta el próximo
3 de septiembre es un claro ejemplo de su pensamiento.
Entre videos de vajilla para ser rematada en Christie’s, cuadernos
dibujados y entintados de gran poesía visual, calados que reflejan
sombras de un bosque posible, instalaciones de objetos que el público
considere pertinentes para ser exhibidos y la acción de hacer
arte en la figura concreta de una ceramista rosarina; Alice Ville cuestiona.
Y no sólo es una acción de arte contemporáneo sino
que cuestiona el mismo desde diferentes perspectivas: qué es
ser artista, cómo se aborda la auto figura, cómo se produce
obra, cómo debe exhibirse o no, en dónde, entre otras,
son las ideas que rondan la preocupación artística de
Alicia Herrero.
La artista, de ninguna manera ingenua, propone al espectador además
de un mundo border line con ciertas nociones de la ensoñación
conceptual, como bien ha escrito sobre la obra Belén Gache ,
en donde podrían convivir Alicia, en aquel país de las
maravillas, con esta Alicia que vive en un país en donde las
maravillas se construyen con otros esquemas.
La Argentina muchas veces se asemeja a una idea surrealista, es esa
misma Argentina en juego refractario – en donde piensa y produce
la artista- la que a veces también cuestiona la legitimación
del arte, la que tiene algo que decir del mercado artístico,
de la figura del artista, del curador, y sobre todo, de la figura de
un museo de arte contemporáneo. En este caso en la representación
de Alice Ville, la propia Alicia representa lo que ciertamente lo contemporáneo
le ocasiona.
Alice Ville es un sueño, en donde el recorrido, propone diferentes
instancias de abordar la problemática, como en el 7mo piso (oficinas
de administración del museo) en donde unos almácigos esperan
frente a los ventanales poder crecer frente a un sol invasivo, y frente
a un río marrón. La pregunta es: podrán crecer
sin interferencias, lo lograrán en una oficina en donde todo
el tiempo se habla sobre arte contemporáneo, estarán capacitados
para sobrevivir a otros surrealismos.
En otro piso del museo, una ceramista produce obra en vivo (Graciela
Pichard) mientras un video muestra la belleza pétrea de vajilla
destinada a una de las subastas más fashion del arte internacional
(Christie’s). Perfección cotidiana versus elaboración
creativa de recipientes con génesis ceramista. Un alejamiento
de subasta, frente a una realidad de producción local. Ficción
realista, versus realidad ficcionada.
En otro piso del maravilloso hiper loft que es el Macro, elementos que
acercan los espectadores son invitados a descansar un rato sobre tarimas
muy blancas. Aquí el contraste es tremendo, la cotidianeidad
de estos objetos es tanta, y tan clara, que ofende a la mirada de algún
espectador que busque Arte. Para los que busquen arte, la cosa será
diferente. Cuestionamiento de objeto duchampeano. ¿Si sos un
salvavidas verde con carita de nada y estas en el museo sos arte? ¿Y
si hay un tampón sin usar en relación a dos bellos objetos
blanquísimos realizados por un artista local –Leo Batisttelli-,
esa tensión, es arte? ¿Un pequeño escudito metálico
con la cara en perfil de Juan Domingo Perón en relación
a los otros objetos, es arte?
Alicia Herrero te propone que pienses qué es arte y qué
no lo es, qué pasa si pones cualquier objeto sobre una tarima
en el museo más legitimador que tiene Rosario.
Alicia te propone que pienses en clave contemporánea, que pienses
el arte desde diversos ángulos, que no seas neutral frente a
lo que estás viendo, que si te produce algo rechazo, que pienses
porqué te pasa, que si algo te gusta te cuestiones porqué
te emociona.
Alice Ville, no es sólo una muestra más de una artista
porteña, es una actitud frente al arte, una forma de vida, un
estar allí en un campo específico sin esperar la trascendencia
histórica. Es una producción constante no verticalista,
es caos, es arte.
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5
Descripción
Alice Ville
por Alicia Herrero
El Proyecto Alice Ville es un espacio relacional entre
géneros artisticos diversos y vida real, podría decirse
que recurre a un juego de variables perceptuales entre la “realidad”
de lo ficcional y la “ficción” de la realidad, apelando
para ello a alteraciones ópticas, sombras, anamorfosis, estetica
relacional, proyectos in situ, obras en progreso, "reallity shows"
intervenciones.
Descripción de Alice Ville en cada piso del
Museo de Arte Contemporaneo de Rosario.
PB –entrada y pasillo
La puerta de entrada con el nombre del museo es intervenida con un cartel
que indica Alice Ville en color verde.El pasillo de entrada se recorrió
con la sombra proyectada en la pared de la palabra fugaz calada en lámina
de aluminio, cruzada por la palabra inscripción taladrada en
la pared, teniendo como intervalo entre ambas el propio pasillo donde
circulan las personas. Ambas con distintas tipografías y dimensiones.
Piso1
En el primer piso nos encontramos con Conversaciones, una propuesta
que deriva del proyecto Chat, aquí el museo es puesto a conversar
con objetos que miembros de la comunidad de Rosario estan acercando
al museo, al mismo tiempo que los medios de comunicación son
atraídos hacia el museo pero en este caso no solo para difundir
e informar sobre exposiciones sino como parte de la propuesta, son tomados
como circuitos estratégicos de comunicación por los cuales
el museo convoca a acercar y prestar durante un mes el utensilio-recipiente
que deseen a partir del día de la inauguración de la muestra.
Es decir que en la inauguración la sala solo consta de plataformas
y dispositivos blancos vacíos. Es una zona que irá cambiando
durante el período completo de la muestra y el ultimo día
será el resultado. De este lugar me interesa cómo aquello
que posee un significante mas o menos fijo en un contexto determinado
comienza a mudar y entra en deriva, esto va tanto para el área
de conservación habituada a conservar “obras de arte”,
tanto como para los expositores de los objetos habituados a usar o mirar
ese objeto en otro sistema de relaciones y de pronto se encuentran con
que el museo trata el préstamo como si fuera “obra de arte”
- con el mismo protocolo documental.
Piso2
En el segundo piso se presenta: Las cosas-Imperio, Las cosas es una
subsala dentro de una sala donde se presenta el video Imperio. Las cosas
es una sala “secreta” porque ocurre detrás de la
pared que limita la sala principal, solo es posible percibir su interior
desde una perforación de 15 cm de diámetro sobre la misma.Desde
ese punto de vista se visualiza un taller real de cerámica produciendo
sus piezas, es el taller de Graciela Pichard donde ella trabaja como
siempre, pero en esta otra condición, el momento de la producción
esta puesto en escena, pero solo es percibido desde el mismo habitad
donde se proyecta el video. Imperio esta realizado a partir de una foto
tomada prestada de Christie's Gallerie´s. Me resulta atractivo
acá la tensión arte –representación/ vida
real- presentación, involucrando la propia arquitectura del museo
y estableciendo un espacio secreto detrás de un supuesto límite:
el de la vida real.
Piso 5
El castillo - tomado prestado de una revista de venta de casas suntuosas
del Reino Unido- esta descentrado, impreso en la pared en un ángulo
de la sala y con instrucciones para ser mirado desde un punto de vista
(un cono de visión real ); al mirar desde allí , pareciera
salir del plano y tomar cuerpo, mientras la perspectiva del cruce de
planos de las paredes de la sala pierden profundidad y referencialidad.
El bosque de los cuentos de hadas es motivo de invetigación entre
imagen y escritura, la imagen solo es percibible en la proyección
de sombras de unas láminas de aluminio caladas que han sufrido
un proceso de anamorfosis.
Piso 7 Tienda
La propia tienda del museo tiene para Alice Ville ciertas particularidades:
un sector de venta de las cerámicas producidas por Graciela y
un sector de intercambios de ciertos productos por dibujos que se pueden
realizar allí. Y el acceso a estamparse donde cada uno desee
(mochilas, remeras, camperas, etc) la frase Estoy Aca.
Piso 8 oficina de administración
La particularidad de la oficina de administración de poseer dos
ventanas al hermoso rió Paraná y tener una abertura en
el techo desde donde puede ser visualizada la actividad para el público
visitante, fue el lugar para inaugurar allí en la apertura de
la muestra una microhuerta de radicheta, rucula, acelga y calabaza que
durante el período de duración de la misma será
cuidada por los integrantes de la oficina.
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